divendres, 1 de maig del 2015

¡Esa cabeza!

Buenas

Cuántas veces hemos oído: a este le perdió su mala cabeza, este no tiene cabeza o si este jugador tuviera cabeza...
Pues bien, como podéis imaginar, mi entrada de hoy va relacionada con nuestra almendra, tejado o simplemente nuestro cerebro.
Soy de los que cree al 100% en la psicologia deportiva y sus beneficios. La pócima mágica está en la permeabilidad del deportista y como consigue incidir el pscicólogo en la mente del jugador. De entre tantas lagunas que sufrimos en nuestro querido hockey patines, una de las mayores es la falta de ayuda psicológica por parte de profesionales.
Una temporada de competición se divide en muchas fases: pretemporada, inicio, desarrollo, pequeñas vacaciones y recta final. El jugador, al igual que un trabajador que tiene su jornada laboral de 8 horas y no está igual de fresco para realizar su trabajo en la cadena de montaje a las 8 de la mañana como a las tres de la tarde, también tiene sus periodos de inestabilidad.
Durante la temporada tenemos que gestionar muy bien los momentos en que no tocamos ni bola, los momentos en que no jugamos lo que nos gustaría, los momentos en que nos sentimos con todo el feeling del mundo y los momentos en que nuestro equipo nos pide que nos colguemos a todos los compañeros en la espalda para ganar un partido.
En todos estos momentos sería importantísimo poder recibir la ayuda de un profesional que nos entienda, que nos escuche, que nos ayude.

Mi psicologo deportivo imaginario se llama Pepe. Yo soy Albert. Voy a recrear un diálogo ficticio que perfectamente podría darse en la realidad.

-Albert: Pepe, necesito tu ayuda. No meto un gol ni al arco iris. No defiendo nada. Estoy desquiciado.
-Pepe: No te preocupes. Primero vamos a diagnosticar cuál es tu problema. Tu problema no es la falta de punteria o que no sepas defender. Tu problema es la anisiedad y tu falta de concentración. Vamos a tratar de solucionarlo tranquilamente.

Al jugador, que en estos momentos no está rindiendo a su mejor nivel, le das una dosis de serenidad; esa serenidad que le hará volver a su mejor versión. Él se siente comprendido. Lamentablemente, esta escena ficticia no se da casi nunca y el jugador tiene que autogestionar sus emociones, sus dudas o sus éxitos de manera unilateral, cosa que en muchas ocasiones no conlleva una buena solución.

A lo largo de toda mi carrera he tenido la suerte de jugar con jugadores increíbles, con los mejores del mundo. Considero que me he empapado de ellos hasta la saciedad. Ves como se mueven en la pista, como definen delante del portero, como estructuran la defensa o simplemente como celebran los goles. Estos aspectos son "fáciles" de copiar. Hay una cosa, pero, que no se puede copiar: la mente del jugador. A lo largo de mucho tiempo me he preguntado que es lo que realmente diferencia un buen jugador de un crack: ¿será el disparo más potente? ¿será el físico? ¿o quizás la habilidad técnica con la bola? Obviamente que estas preguntas tienen una respuesta afirmativa pero lo que realmente hace diferentes a los cracks de los otros jugadores es su cabeza.

Para entenderlo bien, que mejor que recoger la propia experiencia de un mega-crack de nuestro deporte. Juega en Portugal, su nombre es Gonçalo Alves y si, es mi compañero de batallas en el Oliveirense. Creo que no necesita presentación alguna. Id a Youtube, introducid su nombre, poneos un babero y disfrutad de lo que es capaz de hacer con una pelotita y un palo.
Pero lo que realmente me interesa de este monstruo no son sus habilidades técnicas sino que tiene en su cabeza.  Para esto, le hice cinco preguntas que nos ayudarán a meternos dentro de su cerebro y espero que ayude a futuros jugadores de élite (o no) a formar un patrón de lo que es tener la cabeza bien amueblada.

- ¿Sabes que es la presión? En el caso que tu respuesta sea afirmativa, ¿puedes definirmela?

"La presión, para mi, es algo que te obliga a estar siempre al máximo, a intentar sacar el máximo provecho de todas tus habilidades. La presión puede ser beneficiosa porqué siempre vas a querer mejorar y estar siempre a tu máximo nivel para ayudar a tu equipo y también para ser mejor cada día. Además de la presión competitiva, el jugador también experimenta errores técnicos, tácticos, errores de los compañeros, la táctica de sus oponentes y las decisiones arbitrales con las cuales tiene que saber lidiar".

- ¿Tienes miedo a fallar cuando estás jugando?

"¡Fallar forma parte del juego! ¡Y siempre van a haver fallos en todos los deportes! No tengo miedo a fallar, sobre todo porqué el papel que desarrollo dentro del campo me obliga a arriesgar mucho y a veces fallar en algunas decisiones que tengo que tomar. Pero hay que tener conciencia que no podemos fallar constantemente y, con la experiencia, vamos seleccionando cuando devemos o no arriesgar y entonces vamos a perder menos bolas, fallar menos en definitiva. Creo que es muy importante no dejarse influenciar por haver perdido una o dos bolas consecutivas o fallar con tu marca defensiva porqué forma parte del juego y siempre va a suceder; básicamente consiste en aprender de los errores y mejorarlos". 

- ¿Te preparas mentalmente de alguna manera especial antes de los partidos?

"No tengo ninguna manera especial para prepararme para un partido. Me gusta estar relajado, alegre, pero cuando se acerca el comienzo del partido comienzo a concentrarme y a pensar en lo que tengo que hacer dentro del campo y lo que nos puede suceder en el partido".

- ¿Te diviertes cuando juegas?

"¡Es esencial divertirme dentro del campo! Hay que tener siempre una sonrisa en la boca pero con toda la seriedad posible porqué estamos haciendo lo que realmente nos gusta. El hockey patines es lo que más me gusta hacer; jugar con jugadores extraordinarios de un nivel altísimo; jugar en ambientes fantásticos... sólo tengo que aprovechar esto al máximo y divertirme cuando entro al campo para poder dar lo mejor de mi".

- Para acabar, ¿puedes darnos una recomendación para nuestros lectores que tengan dudas cuando jueguen? 

"Por encima de todo que hagan lo que más les guste. Lo más importante es que se diviertan jugando, que se sientan bien en el ambiente que están. Esto (el hockey patines) dura unos años y si podemos aprovechar al máximo no devemos dejar escapar esta oportunidad. Realmente lo que al final te llevas son amigos para toda la vida e interminables anécdotas (partidos, bromas, vestuarios...) y vamos a ser felices porqué estamos haciendo lo que más nos gusta".

Llegados a este punto, agradecer la colaboración de Gonçalo por sus aportaciones y su sinceridad. De sus reflexiones acerca de su "cabeza" me quedo con que repitió en reiteradas ocasiones la expresión al máximo. Para mi, esta es la clave de todo: cuando das el máximo de ti, de tus posibilidades, es sinónimo de que estás concentrado, confiado positivamente y, con toda seguridad, todo saldrá a la perfección. No intentes ser como Gonçalo, ni como Carlitos López ni como otro deportista que admires. Inspírate en ellos pero se tú mismo, trabaja duro y da lo mejor de ti en todo momento.
Piensa que cada segundo que pierdas lamentándote es un segundo de felicidad que dejaste escapar.




Un abrazo y estad atentos a nuevas sopresas que os tengo preparadas.

3 comentaris: